El fichero .netrc

El mecanismo de autenticación que acabamos de ver sólo funciona con las órdenes r* de Unix BSD; la conexión vía ftp seguirá solicitando un nombre de usuario y una clave para acceder a sistemas remotos. No obstante, existe una forma de automatizar ftp para que no solicite estos datos, y es mediante el uso de un archivo situado en el directorio $HOME de cada usuario (en la máquina desde donde se invoca a ftp, no en la servidora) y llamado .netrc. En este fichero se pueden especificar, en texto claro, nombres de máquina, nombres de usuario y contraseñas de sistemas remotos, de forma que al conectar a ellos la transferencia de estos datos se realiza automáticamente, sin ninguna interacción con el usuario. Por ejemplo, imaginemos que el usuario `root' del sistema luisa conecta habitualmente a rosita por ftp, con nombre de usuario `toni'; en su $HOME de luisa puede crear un fichero .netrc como el siguiente:
luisa:~# cat $HOME/.netrc
machine rosita
login toni
password h/l0&54
luisa:~#
Si este archivo existe, cuando conecte al sistema remoto no se le solicitarán ningún nombre de usuario ni contraseña:
luisa:~# ftp rosita
Connected to rosita.
220 rosita FTP server (Version wu-2.6.0(1) Thu Oct 21 12:27:00 EDT 1999) ready.
331 Password required for toni.
230 User toni logged in.
Remote system type is UNIX.
Using binary mode to transfer files.
ftp>
La existencia de ficheros .netrc en los $HOME de los usuarios se puede convertir en un grave problema de seguridad: si un atacante consigue leer nuestro fichero .netrc, automáticamente obtiene nuestro nombre de usuario y nuestra clave en un sistema remoto. Por tanto, no es de extrañar que para que el mecanismo funcione correctamente, este fichero sólo puede ser leído por su propietario; si no es así, no se permitirá el acceso al sistema remoto (aunque los datos de .netrc sean correctos):
luisa:~# ftp rosita
Connected to rosita.
220 rosita FTP server (Version wu-2.6.0(1) Thu Oct 21 12:27:00 EDT 1999) ready.
Error - .netrc file not correct permissions.
Remove password or correct mode (should be 600).
ftp>
Existe una diferencia abismal entre el uso de .rhosts y el de .netrc; en el primer caso al menos conseguimos que nuestra clave no se envíe a través de la red, pero mediante .netrc lo único que conseguimos es no tener que teclear la clave y el login explícitamente: se envían de forma automática. Además de esto, si alguien consigue privilegios de administrador en la máquina cliente, podrá leer los posibles archivos .netrc que sus usuarios posean; por tanto, este mecanismo sólo se ha de utilizar para conexiones a sistemas remotos como usuario anónimo (anonymous o ftp). Quizás nos convenga rastrear periódicamente los directorios de conexión de nuestros usuarios en busca de archivos .netrc, por ejemplo mediante un shellscript muy similar al que hemos visto para buscar ficheros .rhosts.
© 2002 Antonio Villalón Huerta